Acuéstate, cierra los ojos,

en breves segundos vivirás los sueños de Angus

Los sueños de Angus Scrimm: febrero 2007

martes, febrero 27, 2007

Saludo en pompa a mi destino

Te voy a regalar un recuerdo sin lazo, espero que lo conserves sin abrir, impoluto, irreprochable en la lejanía.
Esta distancia, que nos asocia a nuestra propia libertad, conoce las respuestas verdaderas ante esta dicotomía de lo infame. Esta autonomía de animadversión sin casco, que protege nuestras cabezas dadas al dolor ajeno (sin evitar cantar las nuestras), supone un paso, sin muletas que miren atrás llenas de desasosiego, para poder ejercer nuestro derecho al olvido, sin posibilidad alguna de, en la rectificación, practicar alguna defensa efectiva sobre nuestra relación fracasada.

“Te condeno a la indeferencia, mi niña…”

La acusada deberá ingresar el 26 de marzo al alba en la misma, personándose sin mirar al demandante, yéndose en el acto sin ni siquiera despedirse de él.

Hasta esa fecha, en el lugar que va a ocupar la indiferencia a posteriori, sólo puedo meter la mierda que nos bañó, últimamente, con el traje de baño puesto, puesto que debajo de ese bañador escondo muchas vergüenzas por continuar aún queriéndote, obviando mis instintos, obviando lo que debo sentir y lo que siento, obviándote a ti y obviando a toda tu mierda.

domingo, febrero 25, 2007

Escuchad la música, leed la letra. En un año me creo todo.

viernes, febrero 09, 2007

El ciclo continúa ahí

¿Qué es echar de menos? Cuestión sin respuesta posible, por ahora…

¿Qué es echar de menos? Pregunta que te obliga a replantearte los qué, los porqués, los cuándo, los dónde y hasta los para qué sufren tus dudas en esta hoja de papel.

¿Qué es echar de menos? Es vivir aquí, allá y allí al mismo tiempo, sin olvidar que, en el ahí, están todas las respuestas, que dirigen la vida del que viaja demasiado.
Supongo que echar de menos es estar aquí continuamente, pensando en que quieres estar allá y, sin tomarte ni una pizquita de oxígeno, cansarte por no vivir allí.
Echar de menos es levantarte agotado, todas las mañanas, sabiendo que no te has movido ni un milímetro entre tantos sueños que te desplazan.

¿Qué es echar de menos? Emocionarte hasta las lágrimas cinco meses antes de irte de un lugar, porque ya echas de menos a la gente de la que aún te queda mucho para despedirte.
¿Qué es echar de menos para mí? No lo sé, sólo sé que se acerca julio…, y sólo sé que hace una hora me he descubierto yendo a la facultad con una única excusa, darle un abrazo a una amiga, y un solo objetivo, sumar buenos recuerdos que llevar por ahí.
Desde hace dos días he empezado a contar las horas que quedan para que julio me llame a grito pulmón, recoja la maleta que nunca deshago y me vaya de aquí despidiéndome de dos años de mi vida.


¿Qué es echar de menos? Emocionarte hasta las lágrimas, siete meses después de irte, por estar haciendo malabares, para conseguir volver unos días, y así te consuelas un ratito con ellos, echándoles de menos, pero un poquito más cerca.

¿Qué es echar de menos? Es compartir minutos de una vida, mirando continuamente al reloj, y acordarte, a última hora, de que siempre llegas tarde.

¿Qué es echar de menos? Estar aquí con un agujero en el estómago porque quedan 5 meses para decir adiós; estar allí con un vacío existencial, situado entre el pecho y la espalda, sumando meses a la distancia; y estar allá, mirando con nostalgia a la sombra de una familia, de lo que un día fue, de lo que nunca volverá a ser.

¿Qué es echar de menos? Querer.

¿Qué es echar de menos? Estar muy triste el 9 de febrero. Una amiga me dijo que con mi tristeza se vivía mejor que con mi euforia, por lo menos sé que ella va a vivir más a gusto, no es poco...

¿Qué es echar de menos para mí? Dar una patada al aire y, al instante, notar una presión en los glúteos, reconociendo, en el dolor del trasero, que no quiero seguir viviendo a la vez aquí, allá y allí y deciros que, honestamente, ahí ya estoy muy cansado de vivir.

Etiquetas:

sábado, febrero 03, 2007

Al filo

Es curioso el curso que suelen tomar las cosas, mucho más curioso me parece cuando uno las comienza, mientras están situadas en la esfera de lo incontrolado, y después desea estúpidamente que el control supere a lo incontrolado cuando derrapa hacia un precipicio que le lleva a una muerte segura. Yo empecé a derrapar sin paciencia, y ahora la necesito, tanto como necesito un paracaídas.

Sé lo que necesito, pero no tengo ni idea de cómo conseguirlo, necesito armarme de paciencia y para ello debo conseguir, donde sea, una coraza hecha a medida del paciente, que rompa en mil añicos la coraza de inconformismo que me ha rodeado toda mi vida.
Necesito golpear fuerte a mi vida usando una simple caricia; necesito machacar lo que no me gusta de mi mismo usando un simple beso, beso que contenga todo el cariño que tengo guardado y que necesito repartir.

Necesito paciencia para respirar; necesito paciencia para andar; necesito paciencia para no luchar; necesito paciencia para superar la necesidad de llorar continuamente; necesito paciencia para olvidar(la); necesito paciencia para superar este dolor que me empuja a traición, continuamente, hacia la impulsividad, y hacia este jodido precipicio; necesito paciencia para no necesitar(la); necesito paciencia para querer(la) sin que me desespere; necesito paciencia para no echar(la) de menos; necesito paciencia para no desear encontrarme con ella siempre que salgo a la calle a respirar algo de nervio.

Necesito paciencia para soportar esta necesidad de paciencia, necesito paciencia para aguantarme en esta necesidad de paciencia, necesito paciencia para vivir en esta necesidad de paciencia.

Necesito hablar con ella, con la paciencia, y pedirle que se introduzca en mi ser, se agarre a mis entrañas, y escale hasta mi corazón, para después aferrarse a él y, ya allí, regalarme la paciencia que necesito para dejar de estar enamoradísimo de una chica que ya no es ni mi amiga...Necesito paciencia para conseguir que algún día pueda ser mi amiga, necesito paciencia para conseguir concentrarme y estudiar, y vivir, y disfrutar sin necesitar a la paciencia, ni a ella.

Necesito paciencia, sólo paciencia. Necesito paciencia para contrarrestar estar enormes ganas que tengo de gritar, correr , saltar y olvidarme de todo, sobre todo de ti, paciencia...

viernes, febrero 02, 2007

Otro sueño paralelo de angus