Lo que se puede ver con la luz de un flexo

Estoy aquí, agachado en la sombra del flexo que ilumina parcialmente el cuarto dónde duermo y sueño, permanezco en silencio al lado del viejo ordenador de mi hermano, ¿no me veis?, fijaos bien si en vuestros ojos no aparezco, observad con atención si no contempláis mi triste forma empezando a escribir lentamente, al mismo tiempo sin pausa, letras de desamor que están ocupando el preciado hueco de aquellas palabras amorosas que me acompañan desde hace meses.

Acercaos por favor, os lo pido desde la humildad, abrazad al hombre que llora el primer amor no correspondido, consolad con cuidado al ser humano que grita reproches desesperados a su suerte, buscando el mecanismo para que el amor no duela.

Por favor, no miréis detenidamente a mi alma torturada, ¡os lo suplico!, noto que vuestra piedad simplemente mellaría mi felicidad pasajera.

¿Por qué nos enamoramos del amor? La fuerza, la VIDA, la pasión, la felicidad del enamorado que no encuentra correspondencia, lo mejor de la vida y de la muerte, todo en uno cuando el amor golpea a nuestro portón sin avisar.

¿Por qué provoca el amor en nosotros esa curiosa dependencia de la angustia? ¡Cuántas noches sin dormir soñando con ella! ¡Cuántos suspiros derretidos en el alma! ¡Cuántas lágrimas diluidas en los ojos! ¡Cuántos días y cuántas noches deseé levantarme y saltar por la ventana del no recuerdo, deseando volar por la felicidad, descubriendo en el aire que no tengo alas, resolviendo en el suelo que no tengo consuelo!

¿Por qué no me agrada dejar de sentirme enamorado de una mujer que no me ama? No tengo razón que me sirva de respuesta para esta pregunta, algo me impide dejar de amar a quién merece ser amado, algo obstruye el camino de mi desamor, convirtiendo mi vida en un sendero por el que sólo camino yo.

Post Scriptum escrito por Angus Scrimm: escribiré de vez en cuando, no os angustiéis ;-)

Un abrazo a todo el mundo